Mi must have cada verano es sin duda ese enorme bolso de playa. En él nunca faltan: toallas, chanclas, crema solar, cervecita fresca en vena para disfrutar mejor de las altas temperaturas (que no han dado tregua) y, sobre todo, unas ganas enormes de pasarlo bien. Pero ahora ha llegado la hora de cambiar el azul turquesa, aroma a coco, atardeceres y bailes hasta el amanecer por: una fantástica agenda repleta de color y frases empoderadoras; ese aroma a libros nuevos que nos retrotaen a la infancia; listas de la compra de supermercado algo más descafeinadas de lo habitual y, algo que no cambia, las ganas de disfrutar cada día. Ha llegado la hora del cambio de temporada y el bolso de playa le pasa el testigo a los must have de septiembre.
Y es que si algo tiene el verano es que mandamos de vacaciones a los hábitos pero, como todo en la vida se termina, las vacaciones han llegado a su fin y toca dar la bienvenida a septiembre.
Así que demos la bienvenida al mes de los comienzos, de los reencuentros, de las agendas y, por supuesto, de los objetivos. Es nuestra pretemporada hasta enero, el otro mes por excelencia de propósitos y comienzos
Must Have de septiembre:
- Un objetivo. Si hay algo que da vida al ser humano es tener una razón de ser, un sueño y, generalmente, esa razón de ser la encontramos en nuestro propósito materializado en objetivos. Necesitamos tener objetivos para poder sentir que nos desarrollamos personal y profesionalmente. Una persona sin objetivos está destinada al aburrimiento y a la pérdida de sí misma. En coaching trabajamos los objetivos con el método SMARTER:
- Empecemos por objetivos pequeños. En el año 2014 el comandante de los Seal, William Harry McRaven, ofreció el discurso de graduación a los alumnos de la Universidad de Texas. En él nos cuenta que si quieres cambiar el mundo empieces por hacer la cama. Este discurso que te recomiendo ver es una metáfora de la importancia de empezar por los pequeños hábitos. No vamos a conseguir grandes objetivos si no empezamos por los pequeños. Si la cuesta es demasiado alta para tu condición física no lo lograrás y eso te llevará al abandono y, todavía peor, a la frustración. Busca un objetivo y si es demasiado grande, divídelo en pequeños objetivos o tareas. Al conseguir esos pequeños objetivos te sentirás mejor y eso te dará la motivación para continuar. De esa forma estarás trabajando el hábito.
- Amplía tu realidad. No nos pongamos límites antes incluso de empezar. Somos nuestros peores enemigos. Tratémonos y hablemos como lo haríamos con nuestro mejor amigo. Apliquemos ese espíritu creativo y positivo que tenemos con los otros para con nosotros. Recuerda que si puedes soñarlo, puedes hacerlo. Los objetivos son nuestros sueños aterrizados al mundo de los mortales, pero recuerda que para que se cumplan tendrás que esforzarte día tras día.
- Trabaja la motivación. Escucho a muchas personas decir que no hacen las cosas porque no están motivadas y es un grave error. Para empezar confundimos la motivación con un estado de euforia, creatividad, ganas…Motivación viene de motio que significa movimiento; con lo cual, mueve tu cucu porque en el sofá no te va a venir la motivación. El mejor consejo que te puedo dar para trabajar la motivación es que cada noche antes de dormir planifiques al menos tres actividades que vas a hacer al día siguiente. Intenta que al menos una de esas actividades implique salir de casa, hablar con gente o hacer deporte. Y, recuerda, empieza por cosas sencillas. Si no lo logras, empieza de nuevo al día siguiente.
Cada día es una nueva oportunidad
- Organización. Si hay algo que he trabajado y sigo haciendo es la organización. Como autónoma tengo que marcar mis propios tiempos y tareas. Para ello, necesito tener claras las prioridades y entender que no por trabajar más horas voy a ser más productiva. Las tareas importantes marcan la diferencia, pero muchas veces son las que más pereza nos dan y acabamos procrastinando. Empieza determinando las prioridades y, una vez hecho esto, empieza por las tareas que más pereza te den. ¿Por qué? Porque hasta que no las hagas van a estar en tu cabecita. Eso hará que no estés totalmente presente y, por tanto, cometerás errores y, casi al cien por cien, te aseguro que irán al día siguiente de la agenda. Así día tras día.
- Plan de acción. Solo con buenas intenciones no conseguirás tu objetivo. Necesitas un plan que te lleve a la acción. Es solo un plan y puedes cambiarlo las veces que te haga falta si no funciona, pero no cambies el objetivo.
Pasos del plan de acción que debes tener en cuenta y que vas a comprobar que ya hemos tratado la mayoría en esta newsletter:
Al igual que el primer día de gym te causa agujetas por la falta de hábito, a tu cerebro le costará tomar el foco. Pero, ¿has oído que las agujetas se van haciendo más deporte? Por tanto, pon en práctica estos must have y adapta el plan las veces que sea necesario. Te garantizo que si lo haces en enero estarás preparado para la champions de la temporada.